Uno de los aspectos motivadores, quizás el más importante, que me acercaron a la barca de Jábega es el de sus múltiples conexiones con la cultura, historia y religión de la sociedad del rebalaje.

La festividad de la Virgen del Carmen es la expresión más intensamente orgánica y espontánea del pueblo, el de los pies descalzos y pantalones remangados , el de los barcos chicos que tienen por pasarela un manto de arena bañada por el mar.

La virgen del Carmen es la patrona que los protege, pero también es la mediadora, abogada incansable, de las almas perdidas que penan en el purgatorio a la espera del Juicio final, ese que ya no admite recursos.

Ayer, 15 de Julio de 2023, durante la segunda veladilla del Carmen que organiza el club de remo malagueño de jábega, el estandarte de ánimas de la Virgen del Carmen de Huelin , cedido por esta Hermandad, a la que nuestro club se encuentra estrechamente ligado, recorrió el Guadalmedina, desde su desembocadura, pasando bajo los tres puentes que lo conectan con la ciudad, hasta llegar a donde deja de ser navegable, cerca ya del Centro de Arte Contemporáneo. Curiosa paradoja para una barca con milenios de Historia.

La barca que tuvo ese privilegio fue la «María Juliana» , la misma que el año pasado, de forma singular, portó la imagen titular de la Hermandad de Huelin en su tradicional procesión marítima.

Tuvimos un acompañamiento de lujo, con solos de trompeta y cante a capela de Salve Marinera y fandangos dedicados a la Patrona del mar .

Verdaderamente un día inolvidable que quiera la Virgen del Carmen se repita en los años venideros.